07 Sep Arte urbano para marketing de pymes [Entrevista a Lucas Amat]
Hoy bajamos a pie de calle para conocer a Lucas Amat, un grafitero autodidacta que ha convertido su pasión en una forma de vida. No, no es Okuda, ni Banksy, no está en el circuito del arte ni le encargan decorar faros; ni tampoco le interesa. Amat ofrece diseños de grafifi a pequeños negocios de calle (peluquerías, talleres, ultramarinos…) para conseguir más visibilidad e imagen de marca. En estos tiempos de reinvención, su historia puede servir a muchos creativos como ejemplo de cómo ganar dinero con su arte, sin tener que depender del exigente y caprichoso, mercado del arte.
Breve biografía de Lucas Amat
Tabla de contenidos
Me llamo Lucas Amat y llevo pintando desde los 15 años. Ahora tengo casi 27, empecé a pintar graffiti de letras de manera autodidacta cuando estaba en la escuela. Esto me trajo algunos problemas pero llegó un momento que decidí convertirlo en mi profesión. No existía nadie, salvo un par de personas, que pudieran vivir del graffiti, así que estamos abriendo un camino para otras personas.
Sobre arte urbano
En la entrevista le preguntamos sobre mucho más que arte urbano
(1) ¿Qué te consideras primero, Artista o Grafitero?
Ahora mismo creo que ninguna de las dos. Cada vez trato de pintar menos, ya que yo he estudiado marketing digital y me dedico a las ventas. Sigo realizando trabajos pero también estoy creando un equipo de artistas que los realizan. Hay un momento en el que uno no puede ocuparse de todo. Antes hubiera dicho que soy más graffitero que artista, ahora creo que soy mas marketer.
(2) Has realizado muchos proyectos con marcas comerciales pero ¿tienes experiencia, o contacto, con el mercado del arte (galerías, ferias…)?
La verdad que no, siempre me han dicho que sería interesante que entrara en ese mercado, ya que dicen que me desenvuelvo bien con la gente y que podría ser representante. Pero la verdad es que el arte me aburre un poco. Los formalismos, no sé, nunca me ha interesado mucho. Nosotros usamos el arte para hacer marketing, para ayudar a los comercios a aumentar su visibilidad. Eso me motiva más. El poder ayudar a la gente. El arte en sí mismo no me resulta tan atractivo.
(3) ¿Qué opinas de la eclosión del arte urbano en el mercado del arte?
Artistas como Okuda, en España, u otros internacionales (Mr. BrainWash, MissVan, etc)
Me parece genial y necesario. Me alegro mucho por ellos. Pero creo que no todos los artistas podrán seguir su camino. Por eso nosotros hemos abierto otro. Si no consigues ganarte la vida con tu arte, que es muy difícil, puedes adaptarlo un poco y trabajar para empresas o comercios como hacemos nosotros. Cuando te adaptas al otro siempre es más fácil que te compren simplemente por ser tú. Aunque evidentemente, si al final lo consigues, es más rentable.
(4) En plena pandemia con la dificultad que artistas y creadores tienen para comercializar su arte, vender online parece el mejor camino, y sin embargo, tu experiencia personal de “bajar el arte” a lo local nos parece interesante: ¿qué consejo darías a otros artistas (urbanos o no) para encontrar nuevas vías de negocio fuera de los caminos más obvios?
Bueno, en mi opinión, el arte por sí mismo es algo poco necesario, no me malinterpretes. No es algo de primera necesidad. Nosotros usamos el arte urbano como herramienta para ayudar. No es un gasto, lo convertimos en una inversión. Y ahí, en momentos de dificultad, la gente no tiene porque no invertir. De hecho, muchas veces es el momento de invertir. El dinero está ahí, pero la gente no lo quiere malgastar en momentos difíciles, al revés, quiere mejorar sus comercios para asegurar su supervivencia. Nosotros ofrecemos eso, hacemos graffiti profesional o arte urbano para que ellos aumenten su visibilidad, impacten más a sus posibles clientes, destaquen sobre su competencia y sobre el resto de tiendas de su misma calle.
Hay marcas que pagan muchísimo dinero por anunciarse en la calle. Al menos que las tiendas aprovechen sus recursos. Es lo mínimo. Contestando a la pregunta: busca ayudar a los demás, no se trata de que los demás te ayuden a ti. La gente es egoísta. Te comprarán si les haces mejores, si les ayudas a conseguir SUS objetivos. Esto es algo importante.
(5) Por cierto, ¿se está viendo afectada vuestra actividad? ¿tienes pensado alguna actividad digital?
De momento no, somos una empresa pequeña pero estamos contentos. Tenemos trabajo. No se me ocurre cómo puedo vender más mi trabajo de manera digital. Todo el mundo se va a lo digital ahora, y eso es importante, está claro. Pero las tiendas no pueden olvidar que precisamente una de las ventajas de tener una tienda física es que puedes llamar también la atención de la gente que pasa por ese lugar. No hay nada más potente. Así que de momento no.
(6) ¿Qué artistas han influido más en tu obra (no solo artistas urbanos)?
Creo que ninguno. Nuestro trabajo no es mejorar ni mi obra ni la de ninguno de los artistas que trabajan con nosotros. Nuestro trabajo es hacer algo que ayude a nuestro cliente. La obra de cada artista es algo personal que queda fuera del trabajo. Los diseños los crean diseñadores especializados en marketing que entienden que es lo que necesita el cliente, el concepto y trabajan sobre eso. Necesitamos artistas que repliquen esos diseños en tamaños grandes pero su obra aquí no tiene lugar. Es más importante poder ayudar a otros.
Me gusta Banksy, aunque suene típico, pero no por su obra. Su obra es fácil de replicar. Me gusta porque sabe moverse en los tiempos adecuados para generar revuelo. Eso es vital. Se vende bien.
(7) Para muchos, los verdaderos artistas del siglo XXI son los grafiteros, ¿estás de acuerdo?
Sí, artistas como Okuda, Felipe Pantone, Pichiavo, Kobra… Están ganando mucho dinero con sus trabajos y sus obras. La gente paga para que ELLOS pinten lo que quieran. Tienen todo mi respeto, aunque hagamos cosas distintas.
(8) Del top 10 de ventas de arte en subastas en España, ¿cuál te quedarías? ¿Por qué?
Me quedo con la obra de Eduardo naranjo. Ese cuadro parece una fotografía. Para mí ese tipo de obras tienen mucho valor.
(9) Una recomendación cultural: un libro, peli, serie, disco…
Película, Old Boy, todo lo que haces te vuelve en el futuro. Hasta la acción más insignificante.
Más información sobre Lucas Amat en su web
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