Tony Cragg: el escultor más nombrado en España esta semana

Anthony Douglas Cragg o Tony Cragg, nació en Liverpool el 9 de abril de 1949 y es un escultor británico de gran renombre en el panorama actual del arte siendo uno de los artistas contemporáneos británicos más prestigiosos. Después de un periodo en el que trabajó como técnico de laboratorio, Cragg estudió arte en el Colegio de Arte y Diseño de Gloucestershire y luego en la Escuela de Arte de Wimbledon entre los años 1969 y 1973. Durante esta época recibió enseñanzas de Roger Ackling, quien le presentó a los escultores Richard Long y Bill Woodrow. Completó sus estudios en el Royal College of Art entre 1973 y 1977, donde fue contemporáneo de Richard Wentworth. Desde 2009 es director de la Academia de Bellas Artes de Düsseldorf.

Abandonó el Reino Unido en el año 1977 instalándose en Wuppertal, Alemania, donde ha vivido y trabajado desde entonces. En esta misma ciudad ha puesto en marcha una fundación que lleva su nombre y gestiona un parque de esculturas abierto al público en el que organiza exposiciones temporales de su trabajo y del de otros artistas invitados. También tiene un taller en la isla de Tjörn en la costa occidental de Suecia.

Cragg, entre las numerosas e importantes exposiciones a las que ha participado, hay que mencionar que participó en la documenta de Kassel, expuso en Basilea en 1990 y ha recibido importantes premios internacionales, entre ellos el prestigioso Premio Turner en el año 1988 y en 2007 el Premium Imperiale. Caballero de las Artes y las Letras de Francia en 1992, Académico de la Royal Academy of Arts de Londres en 1993, Orden del Imperio Británico en 2002, la Orden del Mérito de la República de Alemania en el año 2012 y representó a Gran Bretaña en la Bienal de Venecia de 1988, cuya obra ha sido expuesta en los mejores museos del mundo.

Muchas de sus primeras obras se hicieron con materiales de construcción y materiales domésticos desechados. Esto le dio una amplia gama de materiales principalmente artificiales y le proporcionó preocupaciones temáticas que se hicieron características de su obra hasta la actualidad.

Durante los años setenta hizo esculturas usando técnicas simples como el amontonamiento de materiales, división de estos o mediante su aplastamiento. En 1978 recogió fragmentos de plástico desechados y los colocó por categoría de colores. Poco después de esto, hizo obras sobre el suelo y relieves que creaban imágenes. Una de estas obras, “Britain Seen From the North” realizada en 1981, representa la forma de la isla de la Gran Bretaña sobre un muro, orientada de manera que el norte queda a la izquierda.

Más tarde, Cragg usó materiales más variados y tradicionales como son la piedra, la madera, el aluminio, el bronce, el acero o el plástico, que transforma en formas orgánicas y realizando formas simples con ellos, como tubos de ensayo.

Actualmente y hasta el 4 de noviembre se puede visitar la exposición de Tony Cragg en la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia con el patrocinio de la Fundación Hortensia Herrero, compuesta por 6 de sus obras, las cuales se encuentran repartidas por este espacio. Cuatro de estas obras pueden verse sobre el agua en diversos estanques de la Ciudad de las Artes de las Ciencias, algo inédito ya que es la primera vez que expone sus obras sobre una lámina de agua.

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